La sociedad está en constante cambio y con ella el mercado inmobiliario. Como consecuencia, en los últimos tiempos han aparecido nuevos modelos de vivienda que buscan adaptarse a las nuevas realidades y formas de vida de las personas.

Entre estos nuevos modelos destacan especialmente el cohousing y la nuda propiedad que poco a poco han ganado adeptos y están cada vez más extendidos entre la sociedad.

Cohousing

El cohousing es un modelo de viviendas compartidas y autogestionadas donde las personas comparten grandes zonas comunes sin renunciar a la intimidad de una vivienda propia.

Este concepto está relacionado con las nuevas tendencias de consumo compartido donde el coworking o el carsharing son grandes abanderados. Pero su origen está en la década de los 80 cuando jóvenes de países escandinavos decidieron establecer este tipo de vivienda para compartir gastos comunes.

Sin embargo, con el paso de los años, esta tendencia se ha ido orientando más hacia las personas mayores, como alternativa a la residencia tradicional, que permite mantener una mayor independencia y vida social, además de suponer un ahorro respecto a los modelos de siempre. Por ello cada vez están más extendidas en España los denominados cohousing seniors, modelos de vivienda compartida que ofrecen servicios propios de una residencia como médico 24 horas o monitores de actividades físicas y tiempo libre.

Muestra del impulso que está cogiendo está tendencia son también otras formas de cohousing que están apareciendo para públicos específicos, como por ejemplo el Ecohousing, donde se ofrecen viviendas sostenibles para disfrutar de las ventajas de la vida rural frente a los inconvenientes de las grandes ciudades.

Nuda propiedad

La nuda propiedad es un modelo de trasmisión patrimonial que te permite vender tu vivienda pero seguir disfrutando de ella mientras dure el periodo establecido de usufructo, habitualmente hasta el fallecimiento del usufructuario.

¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes que ofrece este modelo para cada una de las partes?

Ventajas para el vendedor (usufructuario):

• Puede seguir haciendo uso de la vivienda mientras dure el periodo de usufructo y aunque cambie el nudo propietario.
• Si por cualquier razón decidiera no seguir haciendo uso de la vivienda, tiene derecho a alquilarla y obtener una renta, así como a vender el usufructo a un tercero.
• Los gastos que tiene que asumir por la vivienda se reducen ya que sólo tendrá que afrontar los relacionados con el consumo.

Ventajas  para el comprador (nudo propietario)

• Adquiere la vivienda por un precio inferior al precio de mercado ya este se calcula sobre un descuento en función de la edad del usufructuario o periodo de usufructo, siendo el precio menor cuanto mayor sea dicho periodo.
• Tiene derecho a vender la nuda propiedad si así lo desea, siempre y cuando respete al usufructuario.

Inconvenientes para el vendedor (usufructuario):

• Deja de ser propietario de la vivienda aunque pueda seguir viviendo en ella por lo que pierde el derecho a dejarla en herencia.
• El precio de venta será menor que el conseguiría a través de un proceso de venta habitual.

Inconvenientes para el comprador (nudo propietario)

• Es responsable de todos los gastos de la transacción como en una compra habitual, además de otros gastos e impuestos relacionados con la propiedad como el IBI o los gastos de comunidad y mantenimiento de la vivienda.

¿Pensando en comprar un segunda vivienda? Estos son los consejos que no debes olvidar.