En España no es obligatorio como en otros países europeos tener un seguro para nuestro hogar, a no ser que la casa esté hipotecada, en cuyo caso, la ley nos dice que la vivienda deberá contar con un seguro contra daños que cubra, como mínimo, los derivados de un incendio.
Por ello, hasta hace poco era una práctica habitual de los bancos añadir la contratación del seguro de hogar como requisito para la obtención de una hipoteca. Gracias a la nueva ley hipotecaria aprobada a finales del 2018 los bancos ya no pueden establecer la contratación de productos asociados, como los seguros de hogar, como condición para conceder las hipotecas.
Sin embargo, aunque el banco no pueda obligarte a contratarlo o no dispongas de hipoteca, tener un seguro de hogar es siempre recomendable, especialmente en lo referente a nuestra responsabilidad civil frente a terceros, ya que este nos cubrirá ante los daños que pueda sufrir nuestra vivienda o que podamos provocar accidentalmente a otros, en función de las coberturas que hayamos contratado.
Para empezar, debes saber que existen dos tipos fundamentales de seguro de hogar:
El número y tipo de coberturas que puede incluir un seguro son de lo más variadas, desde un seguro básico hasta una asistencia de hogar completa. Estas son algunas de las coberturas más interesantes que puedes incluir en tu seguro de hogar:
El seguro que te permitirá cumplir con tu hipoteca
Te contamos algunas reformas de distinta envergadura con las que incrementa el valor de tu vivienda y conseguir un mejor precio por ella.
La AEV prevé que el precio de la vivienda seguirá al alza en el 2020 pero con mayor moderación.